El próximo dos de junio, además de la elección presidencial, de 128 senadores y 500 diputados, se deciden 8 gubernaturas y la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México, solo por mencionar las elecciones de mayor jerarquía. De todas las elecciones locales, la de la Ciudad de México es sin duda la de mayor importancia.
Desde 1997 la Ciudad de México ha sido gobernada por dos partidos políticos: el PRD y Morena. En 2018 sucedió algo que no había pasado en los últimos 21 años, el mismo partido que estaría al frente del gobierno federal gobernaría la Ciudad de México. Antes del 2018 siempre fue distinto el partido político a cargo del gobierno federal y el de la capital del país.
El electorado de la Ciudad de México ha representado históricamente un electorado de vanguardia, un electorado sofisticado difícil de medir. Por ello, más allá de las estimaciones pre electorales, los datos duros de elecciones recientes anteriores muestran un comportamiento distinto a otras regiones del país.
Los resultados de la elección intermedia del 2021, en la que Morena obtuvo solamente el 40 por ciento de la preferencia en la entidad, hacen pensar a la oposición que tiene posibilidades de obtener un triunfo en 2024. Probablemente la mayor diferencia entre lo que pasó en la elección del 2021 y las que tendremos el próximo 2 de junio se llama participación.
En la última elección para Jefe de Gobierno de CdMx en 2018, salió a votar el 70 por ciento del electorado. En la elección presidencial a nivel nacional votó el 63 por ciento. Es decir, votó 7 por ciento más del electorado en la capital. Sin embargo, en 2021 sólo salió a votar el 52 por ciento de la población, el mismo porcentaje que votó a nivel federal ese año de elección intermedia y 18 puntos por debajo de la elección de 2018.
La hoy candidata a la presidencia del país Claudia Sheinbaum, obtuvo 47 por ciento de los votos para ser Jefa de Gobierno en 2018, mientras que Alejandra Barrales, su principal contendiente, llegó a 31 puntos de preferencia, 16 puntos de diferencia. La ex Jefa de Gobierno estuvo 6 puntos por debajo del actual presidente López Obrador, quien llegó a 53 por ciento de la preferencia. Con estos números como antecedente esperaríamos para el 2024 una mayor participación en la Ciudad de México que a nivel presidencial, y ello podría marcar la diferencia respecto al 2021, donde los resultados estuvieron determinados por la baja participación.
El efecto coletazo, como se le conoce a la influencia que tiene una elección de mayor rango sobre otras de menor importancia, favorece claramente a la candidata de Morena, Clara Brugada. En la última medición de Parametría en la Ciudad de México se observa una diferencia a favor de la candidata de Morena de 14 puntos porcentuales. Clara Brugada obtendría 46 por ciento de la preferencia, mientras Santiago Taboada obtendría 32 por ciento. Una diferencia de 14 puntos porcentuales. Salomón Chertorivsky obtendría lo mismo que tiene su partido a nivel nacional, 5 puntos porcentuales.
El factor clave de la elección está en lo que podríamos llamar participación diferenciada. Lo que sucedió en 2021 es que salió a votar una oposición muy motivada y los simpatizantes de Morena participaron en menor proporción. Ello explica en buena medida el diferencial de menor participación en el agregado de 18 puntos entre 2018 y 2021.
La ventaja que tiene en esta elección Morena y su candidata Clara Brugada, es que es una elección concurrente con una tasa de participación por arriba de la elección presidencial. Es decir, no sólo le beneficia que en la elección presidencial, la candidata de Morena Claudia Sheinbaum cuenta con una amplia ventaja sobre la candidata del frente Xóchitl Gálvez, (más de 20 puntos de diferencia en la última medición de Parametría), sino que es probable que el diferencial de participación en esta elección no sea como el del 2021.
En el historial de este siglo de las elecciones en esta ciudad, las diferencias son amplias entre el primero y segundo lugar, por lo general dos dígitos. Así sucedió en 2006, 2012 y 2018, salvo en la elección del año 2000. En esa elección, la elección se cerró a 4 puntos porcentuales y el candidato del PRD, López Obrador, le ganó a Santiago Creel del PAN. Ese mismo día, el ex presidente Fox ganaba la elección presidencial con 7 por ciento sobre Francisco Labastida.
En la elección de junio próximo, es probable que también se presente un fenómeno de voto dividido, sin embargo, las candidatas punteras hoy, tanto para la presidencia del país, como para la Ciudad de México, pertenecen al mismo partido, Morena. Es decir, el elector no tiene que decidir por dos opciones partidistas distintas.
En resumen, el resultado de la elección de la capital del país dependerá de dos fenómenos: el efecto coletazo de la elección presidencial sobre la local y el diferencial del voto motivado de la oposición versus el voto del partido en el poder, que en 2021 no salió, en un contexto de alta participación.
Faltan menos de tres meses para la elección, falta todo por suceder en las campañas. Sin embargo, con las mediciones realizadas hasta hoy y tomando en cuenta las condicionantes mencionadas, la ventaja sigue estando a favor de Clara Brugada, candidata de Morena.
Nota Metodológica: Población objetivo: Personas mayores de 18 años con credencial para votar vigente. Representatividad: Ciudad de México. N° de encuestas: 1,000 entrevistas cara a cara en vivienda realizadas del 23 al 26 de febrero del 2024. Método de muestreo: aleatorio sistemático con probabilidad de selección proporcional al tamaño. Marco muestral: secciones electorales reportadas por el INE. Nivel de confianza estadística: 95%. Margen de error (+/-) 3.1 %. Diseño de cuestionario, muestra, operativo de campo y análisis: Parametria S.A. de C.V.