Niveles de información mínimos de la ciudadanía son necesarios para cualquier discusión y tomar una mejor decisión de una iniciativa legislativa. Un ejemplo puede ser la discusión de los órganos autónomos en general o del Instituto Nacional Electoral. Reconocer su relevancia o su inutilidad (como sugiere el Presidente), requiere de un público con los niveles de conocimiento lo suficientemente altos como para saber qué conviene más a sus intereses o convicciones.
Parametría realizó una medición en su última encuesta nacional sobre el tema. Lo que se observa en los niveles de conocimiento de este asunto, es que son sorprendentemente bajos, primero si consideramos la relevancia del tema y segundo si observamos el tiempo y la intensidad con la que estuvo en medios de comunicación.
En particular son preocupantes los niveles de conocimiento tan bajos del proceso de selección de los consejeros electorales. Cuando Parametría realizó la medición hace más de 10 años el nivel de conocimiento era más alto. Al parecer se comprendía mejor el proceso. Sin duda el dato más preocupante es la falta de entendimiento sobre cómo se eligen a los consejeros del INE.
Los niveles de conocimiento de los nombramientos de nuevos consejeros son también bajos. Menos de una tercera parte de la población se enteró del cambio de consejeros.
Probablemente porque es un cambio o una renovación se observa una expectativa alta en el cambio de consejeros. Sin embargo, su reputación parece cuestionarse. Es prácticamente el mismo porcentaje de quienes creen que los consejeros mantienen una simpatía personal con los partidos (43%) y quienes no lo consideran así (47 %). También se registra un nivel de crítica sobre la institución. Son muy similares los porcentajes de quienes creen que el INE cuenta con un prestigio propio (47%), y aquellos que creen que no importa quienes sean los consejeros (42 %). En la misma medición se registra una crítica al proceso. La mayor parte de los entrevistados (51 %) consideró que la Cámara de Diputados no debería de elegir a los consejeros del INE.
La gestión de Lorenzo Córdova presenta también un saldo mixto. Tiene el mismo porcentaje de buena y mala opinión en su gestión. Si consideramos la crítica que ha recibido por parte del presidente López Obrador se podría considerar que ha resistido los embates. Cualquier institución o figura pública que sea cuestionado por un presidente con cerca de 70 por ciento de aprobación puede sufrir un daño severo. Es preciso mencionar que menos de una tercera parte de la población sabe de la gestión de Lorenzo Córdova al frente del Instituto Nacional Electoral. Es decir, la opinión sobre su gestión también está sustentada en bajos niveles de información.
La discusión de los órganos autónomos y su importancia para la ciudadanía presupone un nivel de conocimiento mínimo. Por los niveles de conocimientos registrados se podría concluir que la ciudadanía está opinando más basada en prejuicios que en información meditada o reflexionada.
Es cierto que el tema de los órganos autónomos es complejo y difícil de entender para el ciudadano promedio. Mucho más difícil cuando hay tanto ruido mediático o eventos a los que deberíamos poner atención. Sin embargo, nunca los esfuerzos de comunicación o educación van a ser inútiles.
La iniciativa de la Reforma Electoral que se ha propuesto sea Plan A, B o C, por sus implicaciones requiere una discusión pública más amplia. Lamentablemente nuestra opinión pública no parece estar muy involucrada. Esta puede ser una de esas discusiones en las que el ciudadano se termina enterando más por sus consecuencias que por la discusión previa que se tendría que haber dado antes de su implementación.
Nota Metodológica: Población objetivo: Personas mayores de 18 años con credencial para votar vigente. Representatividad: Nacional. N° de encuestas: 800 entrevistas cara a cara en vivienda realizadas del 31 de marzo al 5 de abril del 2023. Método de muestreo: aleatorio sistemático con probabilidad de selección proporcional al tamaño. Marco muestral: secciones electorales reportadas por el INE. Nivel de confianza estadística: 95%. Margen de error (+/-) 3.5 %. Diseño de cuestionario, muestra, operativo de campo y análisis: Parametria S.A. de C.V.